Cosas que aprendí un día y escribo para no olvidar

**Creo en la ciclicidad de las vidas, como en el ciclo del agua - sol, nube, agua -, en la ilusión y en la soledad, hermanas. En la escritura antes que en las palabras y en la lucha interna y externa.**

jueves, noviembre 17, 2005

David.

a veces escribo pero no me lees. escribo. y te quiero, eres un buen amigo. te recuerdo lo escrito. aunque pienses que es mentira, todo no lo es.

Segundo poema dedicado.
Enésima felicitación de cumpleaños.

Diálogo de poetas, cada noche,
discusión acalorada de verduleras.

Mírate a los ojos y dite.
Mírate y siéntete más dentro
tú a ti, que eres tu compañía,
tu héroe, tu no solo.

Tú te sientes bien y yo más cerca.
Extrapola a todos y
pon un patio de butacas
para cuando te encuentres,
te ames y nadie pueda detenerte,
ni interrumpir tu interpretación.

No habrá tomates.

Cuídate de lo malo,
nadie dijo que fuera perfecto
aquello que tú dices no ser verdadero.
Nadie sabe que sí lo es,
el que cree en lo relativo.
Ama un mundo relativizado
con verbos a medias verdades,
sentimientos desperdidos y no.

Desarrolla la no-rabia,
la del hombre que escapa
y en su escapada se pone delante
de ellos y ellas que desmiran o
lo hacen con desgana.
¿Alguna vez te pusiste delante?
Ármate para vivir. No hay renuncias.

Tus lágrimas son
el flujo que fluye por la pared,
que escapan cuando dilata.
Ciérrate de piernas, guarra.
No prostituyas más tus ojos.

Y tengo un deseo para tu corazón.
Escríbetelo: este curso sacaré buenas
notas en "amor a uno mismo".

Crecido.